Desde las 16.15 horas
El incendio forestal de Culla (Castellón) se encuentra estabilizado desde las 16.15 horas de este sábado tras mantenerse activo durante más de 24 horas y arrasar 400 hectáreas de la localidad y municipios colindantes. Los medios aéreos se han retirado de la zona a excepción de un helicóptero de coordinación, según ha informado el Centro de Emergencias 112 de la Generalitat Valenciana.
La evolución favorable del fuego y de las condiciones meteorológicas ha hecho que los medios aéreos hayan comenzado a dejar la zona calcinada sobre las 15.30 horas. Primero se han retirado dos aviones, un helicóptero y un 'air tractor' de la Generalitat, y sobre las 16.40 lo ha hecho el hidroavión FOCA del Ministerio de Medio Ambiente (Mapama).
El Consorcio de Bomberos de Castellón (CPBC) espera dar por controlado el incendio "en breve", después de que el viento haya dado una pequeña tregua al amainar en la zona quemada. Desde el órgano provincial han manifestado su reconocimiento por el "duro trabajo" de todo el dispositivo y han expresado su deseo de una pronta recuperación al bombero que resultó herido durante la pasada jornada.
El fuego se decretó a primera hora de la tarde de este pasado viernes, en una zona conocida como 'La Esparreguera' ubicada en las inmediaciones de Els Rosildos y del término municipal de Culla. Su extinción se complicó por las fuertes rachas de viento, de hasta 120 kilómetros por hora, que impidieron el trabajo de medios aéreos hasta esta mañana.
Durante toda la noche y el sábado, han participado en la extinción más de centenar de efectivos humanos, entre bomberos, forestales, brigadas helitransportadas y personal de coordinación. De los ocho medios aéreos que se han desplazado a Culla, se mantiene en la zona un helicóptero de la Generalitat Valenciana con base en el aeroclub de Castellón.
Masías desalojadas y un bombero herido
El incendio no ha afectado a ningún vecino de la zona, aunque el bombero del Consorcio resultó herido al quedar atrapado en una masía, por lo que fue evacuado en helicóptero al Hospital La Fe de València. Varias de estas fincas tuvieron que ser desalojadas de forma preventiva.
Los efectivos han trabajado desde el inicio del fuego en condiciones meteorológicas adversas muy extremas, con rachas de viento muy fuertes que han dificultado la extinción. Tanto el viento como el gran déficit hídrico de la zona han dado como resultado una zona de vegetación muy seca.