TRAS UNA DENUNCIA
La Fiscalía de la Audiencia Provincial de Sevilla ha abierto diligencias para investigar la denuncia de Movimiento contra la Intolerancia contra el Ayuntamiento de Coripe (Sevilla), tras una fiesta en la que fue quemada una figura que representaba a la asesina confesa del niño Gabriel Cruz. Fuentes de la Fiscalía han informado de la apertura de las diligencias, por lo que en los próximos días se comenzará a tramitar todo el proceso.
La denuncia fue presentada, según Movimiento contra la Intolerancia, tras difundirse unos vídeos de la fiesta de Judas del pasado Domingo de Resurrección, en los que se apreciaban "vejaciones racistas y violentas" contra el muñeco que representaba a la asesina confesa del niño Gabriel, Ana Julia Quezada.
Se trata de una fiesta que se celebra cada año y que consiste en tirotear a un muñeco hecho de trapo y paja en el que se esconde un poco de gasolina hasta que éste comience a arder. El muñeco representa a un personaje conocido que durante ese año haya destacado por haber realizado alguna mala acción.
La muñeca, explicaba la ONG en un comunicado, "representativa de Ana Julia" fue llevada a la plaza escoltada por unos hombres vestidos de escopeteros, "que antes de colgarla le atizaron varios golpes para después ser tiroteada con munición de salva, hasta que empezó a arder quemándose en su totalidad".
El Ayuntamiento aseguró en su día que no se trató de una fiesta racista, sino de una tradición de más de cien años, "que además es Fiesta de Interés Turístico Nacional", y que los vecinos que lo organizan decidieron este año que la protagonista fuese Quezada.