Shakira
Considera que no hay indicios suficientes de que cometiera los dos delitos contra Hacienda que se le atribuyen.
La segunda causa abierta a Shakira por un supuesto fraude fiscal de 6,6 millones de euros será paralizada. Este miércoles, la Fiscalía ha pedido que se archive, aunque la ha remitido a la vía administrativa para que pague la deuda que Hacienda le reclama por el IRPF y el impuesto de patrimonio de 2018.
La Fiscalía de Barcelona ha informado de que el Ministerio Público ha presentado un escrito en el que apoya la petición de la defensa de Shakira de que se archive la causa, medio año después de que la cantante depositara en el juzgado la cantidad de dinero que Hacienda considera evadidos.
Según fuentes fiscales, la petición de archivo ha sido respaldada también por la Abogacía del Estado -en nombre de la Agencia Tributaria- y por la Generalitat, las otras dos acusaciones particulares personadas.
La Fiscalía de Delitos Económicos presentó esta segunda querella por fraude fiscal contra la cantante, en la que le acusaba de usar un entramado societario para eludir el pago de impuestos en las declaraciones del IRPF y de impuesto de patrimonio de 2018, cuando la artista estaba a la espera de sentarse en el banquillo a raíz de su primera causa abierta por fraude fiscal. Pero ahora, tras meses de investigación, la propia Fiscalía ha concluido que no hay indicios suficientes de que cometiera los dos delitos contra la Hacienda pública que se le atribuyen.
Concretamente, la querella cuyo archivo pide ahora la Fiscalía sostiene que la cantante defraudó a la Agencia Tributaria 5,3 millones del IRPF, correspondientes a los ingresos que percibió por su gira de 2018 llamada 'El Dorado' y por la cesión de sus derechos intelectuales. También habría defraudado otros 773.600 euros en el impuesto de patrimonio por los 12 millones que posee en inmuebles y activos financieros.
Para cometer esos fraudes, la Fiscalía considera que la querellada se sirvió de un entramado societario y presentó "declaraciones inveraces" del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), en las que omitió declarar rendimientos y se dedujo gastos que no procedían, con lo que logró reducir la cuota a pagar a Hacienda.
Según la denuncia, Shakira cobró parte de los ingresos que percibía por la cesión de sus derechos musicales a través de una sociedad constituida en Luxemburgo con la que firmó varios "contratos simulados", de forma que se benefició de una tributación "muy reducida" que en el ejercicio de 2018 se situó en el 1,39 %.
Esa firma luxemburguesa, en opinión de la Fiscalía, "era meramente una sociedad interpuesta a los únicos efectos fiscales" que no llegó a desempeñar actividad alguna, más allá de una "intervención meramente formal y administrativa". También refiere la querella de Fiscalía que Shakira utilizó otra sociedad instrumental, constituida en España en 2017, para "contabilizar los ingresos y los gastos correspondientes" a su gira 'El Dorado', pese a que la firma carecía igualmente de actividad real.
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