A PUNTO DE CUMPLIRSE DOS AÑOS DEL SUCESO
Los abogados de las familias de las cinco víctimas mortales de la tragedia ocurrida en una fiesta de Halloween en el Madrid Arena el 1 de noviembre de 2012 piden penas que oscilan entre 3 y 4 años de prisión para dieciséis procesados en la causa.
Los letrados de las víctimas han presentado este miércoles en el Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, encargado del caso, sus escritos de acusación en los que plantean la apertura de juicio oral para dieciséis imputados y el sobreseimiento de la causa para ocho procesados, según fuentes jurídicas.
Las acusaciones particulares atribuyen a catorce personas cinco presuntos delitos de homicidio imprudente grave en concurso ideal con lesiones, mientras que a los médicos encargados de la enfermería del Madrid Arena -Simón y Carlos Viñals- les imputan tres delitos de homicidio por imprudencia grave profesional en concurso ideal con lesiones.
De esta forma, coinciden con el número de procesados y los delitos que les atribuyó el juez Eduardo López-Palop, que investiga el caso, en un auto notificado el pasado 1 de septiembre a las partes.
Los letrados de las víctimas solicitan penas de 4 años de cárcel para el organizador de la fiesta, Miguel Ángel Flores; el director del departamento de Seguridad de Madridec, Rafael Pastor; el coordinador de Proyectos de Madridec, Francisco del Amo; el coordinador de Seguridad de Madridec, José Luis Rodríguez Caamaño, y el encargado del control de cámaras, Roberto Mateos.
Piden penas de 3 años de cárcel para el director general de Diviertt, Santiago Rojo; el jefe de personal de Diviertt, Miguel Ángel Morcillo, y el técnico de Operaciones de Madridec, José Ruiz Ayuso. También reclaman penas de 3 años de prisión para los coordinadores jefes de Seguriber, Juan José París Nalda y Raúl Monterde; el jefe de equipo de Seguriber, José Antonio Díaz Romero; el jefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo, y los socios de Kontrol 34 Carlos Manzanares y Emilio Belliard.
Los abogados de las tres jóvenes que fueron atendidas en la enfermería del Madrid Arena -Katia Esteban, Rocío Oña y Cristina Arce- piden 4 años de prisión para los médicos responsables de la asistencia médica del evento, Simón y Carlos Viñals.
En los escritos, ponen de manifiesto que "nadie hizo nada" para evitar la tragedia y resaltan la concurrencia de una serie de hechos que dieron como resultado el fallecimiento de cinco chicas. Aluden al exceso de aforo, la apertura de los portones de mercancías y emergencias que permitieron el acceso al recinto de miles de personas que se encontraban en el "botellón" en el exterior del pabellón, la ausencia de requisas, la ineficacia del control de cámaras y la falta de dotación médica para el evento.
Entre otras pruebas para la vista oral, proponen el interrogatorio de los acusados y la declaración de un centenar de testigos entre agentes de la policía, controladores de acceso, personal sanitario, asistentes a la fiesta y lesionados.
Asimismo, reclaman una indemnización para los familiares de las víctimas superior a los 120.000 euros previstos en el baremo de accidentes de tráfico, que deberán sufragar los acusados, junto al Ayuntamiento, las empresas implicadas y las compañías de seguros como responsables civiles.
A consecuencia de una avalancha humana, en la noche de Halloween de 2012 fallecieron Katia Esteban, Rocío Oña, Cristina Arce, Belén Langdon y María Teresa Alonso aplastadas por decenas de personas atrapadas en uno de los pasillos del Madrid Arena.