Longevidad y sobrepeso
Determinan que el sobrepeso que comienza en la mediana edad está asociado con consecuencias sobre la salud a largo plazo.
Desde hace décadas se ha relacionado la obesidad con consecuencias adversas, con enfermedades cardiometabólicas y con la esperanza de vida. Un nuevo estudio publicado en la revista 'JAMA' investiga los posibles vínculos entre el exceso de grasa corporal en la mediana edad y la calidad de vida a largo plazo. Los investigadores buscaban respuestas si tener sobrepeso a los 40 años supondría consecuencias en la etapa de jubilación.
Revelan el sobrepeso en la mediana edad reduce la calidad de vida y se asocia con un mayor coste económico médico en general respecto a las personas con un normopeso. El estudio que ha analizado los datos de 29.621 adultos disponibles en el Chicago Heart Association Detention Project Industry (CHA) entre 1985 y 2015. Se han podido realizar comparaciones entre el estado de sobrepeso y obesidad de clase I o II con los casos con un índice de masa corporal (IMC) normal a los 40 años, y cómo estaban a los 65 años o más.
El 46% de los analizados en Chicago disponía de un IMC normal, mientras que un 39,6% sufría sobrepeso y el otro 11,9% sufría obesidad de clase I y II al iniciar el estudio. Los individuos con sobrepeso y obesidad de clase I y II sufrían de una mayor tendencia a sufrir problemas de salud y a tener una peor calidad de vida respecto a aquellos con un índice de masa corporal normal.
Una peor calidad de vida
Otra de las conclusiones publicadas en el estudio ha sido que la edad media de mortalidad ha sido similar en el grupo de sobrepeso y normopeso, en torno a los 82 años de edad en ambos casos. Para los casos que sufrían de obesidad de clase I y II, la esperanza de vida era menor con una media de 80 años de edad.
En la introducción del documento publicado en 'JAMA' el 15 de marzo, los investigadores destacan que en 2014 se descubrió que la esperanza de vida en Estados Unidos había disminuido por primera vez en dos décadas. Se sugirió que la reducción tenía relación con la prevalencia de la obesidad ya que se asocia con enfermedades cardiovasculares y metabólicas.