EN LA COMUNIDAD VALENCIANA
Cortes de Pallás, en Valencia, cuenta con un único camino da acceso después de que el pueblo quedara aislado el martes por un desprendimiento de rocas.
Los vecinos no han tenido más remedio que habilitar una pista forestal repleta de curvas y de casi 30 kilómetros para poder entrar y salir del municipio. Por la noche, dicho camino es poco recomendable dada a su escasa visibilidad.
En comparación con la carretera principal, la duración del trayecto hasta Valencia por esta ruta alternativa se ha duplicado. Llegar hasta la ciudad supone una media de tres horas.
Los comercios de la zona han sido los principales afectados de este aislamiento. Los restaurantes tienen poca actividad y los repartidores tratan de proveer la mayor cantidad posible de alimentos en un único viaje.
Por otro lado, en el ambultorio, los servicios médicos organizan un dispositivo de emergencias. Calculan que en caso de urgencia, el helicóptero tardaría media hora hasta llegar a Valencia.
Una de las alternativas en la que ya trabaja el Ayuntamiento de Cortes de Pallás es habilitar una vía fluvial con una gran embarcación que permita el acceso y salida de gente del municipio, ya que esta situación de aislamiento podría prolongarse durante casi cuatro meses.