EN MALLORCA
La operación, que ha contado con más de 300 agentes, se dirige contra las principales organizaciones de venta de droga de Mallorca y se ha detenido a la mayoría de los cabecillas de los clanes que se refugian en ese poblado marginal a la afueras de la capital balear.
Además de en Son Banya, se han producido registros en inmuebles de otros puntos de Palma y también de diferentes localidades de Mallorca.
Tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional llevan a cabo intervenciones contra el tráfico de drogas en el poblado, un asentamiento que el Ayuntamiento de Palma se propone desmantelar. Pero recientemente se paralizó por orden judicial la operación de derribo de 45 viviendas de Son Banya a la espera de que el consistorio diseñe un plan de desalojo paulatino para los residentes en el poblado, creado en 1970 como asentamiento provisional para familias gitanas que vivían en chabolas.