Agresión
La víctima de la salvaje agresión en el Metro de Madrid es un enfermero y ya ha sido dado de alta. A continuación relatamos los detalles de cómo sucedieron los hechos.
Repasando las imágenes captadas en el interior del vagón del Metro de Madrid donde se produjo la salvaje agresión a un sanitario que reprochó a otro pasajero que se pusiese la mascarilla frente al coronavirus se aprecian los siguientes detalles. Aunque la tensión se palpa en el ambiente nadie puede imaginar la violencia que tuvo lugar.
La víctima lo único que hizo fue pedir a otro usuario que se pusiese la mascarilla de protección frente a la COVID-19, algo obligatorio en el transporte público. La Policía continúa buscando al agresor en cuyas imágenes se ve que es un hombre que en el momento del suceso lleva una gorra rosa y una mochila. Se solicita ayuda ciudadana e intervención de testigos para localizarlo.
El enfermero que recibió el fuerte golpe en la cara con un objeto punzante ha recibido ya el alta hospitalaria después de permanecer en observación en el Hospital 12 de Octubre. Tras asestar la brutal agresión el autor de la misma abandona el vagón deseándole antes la muerte a la víctima, "Gilipollas, ojalá te mueras". Los hechos ocurrieron en la estación de Alto del Arenal de la Línea 1. Los enfermeros que siguen trabajando en primera línea de la pandemia del coronavirus están indignados con agresiones como estas.
Los usuarios denuncian que el transporte público es uno de los lugares donde resulta más sensible llevar la mascarilla y añaden que cuando se aperciben a las personas que no las llevan se producen escenas violentas.
Otras agresiones en transporte público
En Barcelona, dos vigilantes del metro sufrieron una agresión por parte de dos personas que no cumplían las normas contra el coronavirus. Tras se advertidos por los trabajadores, los individuos comenzaron a pegarles patadas y puñetazos. Los atacantes fueron detenidos.
En un autobús en Vigo un viajero pegó directamente al conductor del vehículo por recriminarle que no llevase la mascarilla puesta. En Granada un joven de 18 años entró en una tienda sin mascarilla y cuando la dueña del comercio le pidió que se la pusiera si pensaba estar en el interior del recinto, él hizo caso omiso y golpeó la cristalera del establecimiento hasta romperla.
En Italia se registró otra brutal agresión a una mujer por el mismo hecho cuyo parte médico fue de traumatismo craneal, rotura del tabique nasal y varias heridas y contusiones. El agresor en esta ocasión fue detenido.