PARA EVITAR LA "GUERRA DE SOMBRILLAS"
El Ayuntamiento de Cullera implantó para este verano una legislación que impide plantar sombrillas a menos de seis metros de la primera línea de playa. Si se incumple la orden se impondrá una sanción y deberá retirar la sombrilla.
Además desde el consistorio se exige que hasta después de las ocho de la mañana, tras acabar los efectivos de limpieza, no se puede plantar la sombrilla, lo que causa una colas entre la gente.
Estas medidas pretende mejorar la imagen turística del municipio evitando la "guerra de sombrillas", que cada verano protagonizan los denominados 'sombrilleros', además de democratizar la playa.
«Esto perjudicaba la imagen turística de la ciudad para que ese no es el turismo de calidad al que aspiramos", explicó el alcalde.