Coronavirus
Tras el estado de alarma decretado para frenar la pandemia de coronavirus, salir a hacer la compra es una de las pocas actividades por las que hasta ahora se nos permitía salir a la calle. Pero ¿qué pasa en pueblos pequeños que no disponen de establecimientos para poder suministrarse de bienes básicos?
No todo el mundo tiene una tienda cerca para abastecerse, por eso en algunas poblaciones de los valles del norte de Navarra los productos de primera necesidad están llegando hasta la misma puerta de los clientes gracias a un supermercado sobre ruedas. Un supermercado en el que no falta detalle.
Como en los grandes supermercados, la clientela guarda la distancia de seguridad frente a la furgoneta de Koldo, creador de esta iniciativa.
Dicen que en esta época del año es cuando hay más gente en estos pueblos. El virus no ha entrado aún en muchos de estos valles, donde se atienden todas las normas de seguridad.
Estos días nadie sube a la furgoneta, Koldo intenta bajar lo mínimo también y todos se quedan fuera esperando su compra.
El coronavirus ha cambiado además la cesta de la compra, "cosas que antes nunca se me acababan, como la cerveza, la harina o la levadura, ahora si que se terminan", explica Koldo y añade que "se nota que la gente está cambiando sus hábitos en casa", unas casas que seguirán abastecidas por un supermercado sobre ruedas.