Universidades
El ministro de Universidades, Manuel Castells, ha explicado las gestiones con las universidades y las comunidades autónomas para poder finalizar el curso tras la suspensión de las clases por el coronavirus. Pero por lo novedoso y problemático de la situación creada y por ser decisiones de otras instituciones no ha podido precisar mucho. Aunque sí ha opinado de forma singular sobre los exámenes.
"Ningún estudiante va a suspender por la pandemia"
El ministro Castells se estrenaba en una rueda de prensa tras estos meses consultando y reuniéndose con universidades y asociaciones estudiantiles. Al inicio de la comparecencia dijo que "ningún estudiante va a perder el curso por causa de la pandemia". Pero después escasearon las precisiones, ya que, como recordó, las universidades son autónomas y las competencias sobre esta enseñanza dependen de las comunidades.
Consejo a los profesores sobre los exámenes
No garantiza que se puedan celebrar exámenes en las aulas este curso, después de que la pandemia del coronavirus haya provocado la suspensión de las clases presenciales desde el pasado mes de marzo en todas las universidades españolas. "Ojalá, pero no lo sabemos", ha dicho Castells en el Palacio de la Moncloa. "Dependerá de la situación de junio, pero en cualquier caso, no podrán ser como siempre", ha aventurado el ministro. Siempre que lo permitan las autoridades sanitarias, ha insistido Castells, los exámenes presenciales deberían realizarse con "distanciamiento social" y evitando "densidad en las aulas", aunque el titular de Universidades aconseja que todas las evaluaciones se planifiquen ya de forma telemática para evitar "improvisar en el último minuto exámenes 'online". Castells, que ha sido durante décadas profesor universitario hasta que entró en el Gobierno, ha apremiado a sus antiguos colegas a "consultar" sin demora a los estudiantes la fórmula para las evaluaciones este curso, recordando que "las universidades son de los estudiantes", ha proclamado enfático. En su opinión, los estudiantes "necesitan información" y también "ser oídos" ante las circunstancias excepcionales en las que siguen el curso académico desde el decreto de confinamiento. Por ello, pide a los docentes que tengan en cuenta "las condiciones psicológicas" de su alumnado. "Hay que ser muy flexible, hay que adaptarse a las condiciones que cada estudiante está teniendo", ha añadido. Sobre el próximo curso, Castells confía en que pueda comenzar en el calendario habitual, después del verano. "Aunque depende de lo que depende todo, de que el mundo no se hunda", ha apostillado. "En principio debería abrirse en los plazos normales, pero habrá que adaptar, seguramente, la presencialidad", ha advertido. En ese sentido, el titular de Universidades augura que el regreso a las aulas no será "de cualquier manera" ni "como antes". Castells da por seguras medidas como el distanciamiento social. "Eso quiere decir que habrá que adecuar las clases presenciales en condiciones que permitan respetar esos dos metros, enseñar en aulas grandes y en horarios distintos, desinfectándolas", pronostica el ministro.
Consejo a los alumnos
Tampoco pudo precisar si se bajarán los precios de las matrículas o subirán las becas. Tampoco qué pasa con los estudiantes que no pueden volver a sus pisos o residencias a recoger los apuntes y sus pertenencias, porque es algo que decide el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska: "Consejo queridos estudiantes. No dejéis nunca los materiales ni los ordenadores que nunca se sabe qué va a pasar".