TAMADABA SIGUE ARDIENDO
El incendio forestal de Gran Canaria, que ha afectado a unas 10.000 hectáreas en un perímetro de 112 kilómetros, se encuentra en fase de estabilización y ya han podido regresar a sus viviendas unas 3.000 personas evacuadas.
El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, junto con la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha explicado en rueda de prensa que los diferentes flancos del incendio están contenidos y se trabaja activamente sobre los puntos más conflictivos para evitar que se produzcan reactivaciones.
Lo que sigue ardiendo es el pinar de Tamadaba, aunque, según el técnico Federico Grillo, el fuego ha respetado la arboleda y el nivel de gravedad es menor del previsto al no haberle atacado un fuego de alta intensidad.
El presidente canario ha aseverado que la imagen de la evolución del incendio es que "hemos pasado de las evacuaciones a los realojos" y a igual que el técnico, ha pedido cautela porque "hay que rematar el trabajo para evitar que la bestia se vuelva a despertar".
Torres ha confiado en que este miércoles se produzcan nuevos realojos y ha subrayado que se mantendrá el operativo, del que han formado parte 16 medios aéreos, hasta que el fuego esté del todo controlado.
Durante la noche de este martes han actuado sobre la zona afectada por el fuego los drones del Estado y los más de 400 efectivos que han trabajado cada noche desde el pasado sábado en las tareas de extinción, mientras que durante este miércoles actuarán desde el aire un total de 18 medios aéreos.
Los avances en el control del incendio han permitido que entre tres y cuatro mil vecinos de barrios como Madrelagua, Cuevecillas, el casco de Valleseco y de Troya, Piletas y El Valle, en Agaete, puedan regresar a sus hogares. La noche de este lunes el riesgo de que el fuego entrara en el pinar de Inagua ha quedado "neutralizado", según ha explicado el director de Seguridad del Cabildo de Gran Canaria, Federico Grillo, quien también ha celebrado que gran parte del Parque Natural de Tamadaba "ha ardido de superficie, respetando el arbolado". "Es un desastre pero no con tanta intensidad como se suponía", ha añadido el técnico , insistiendo en que el fuego "se irá dejando normalizar poco a poco".
Durante este martes los medios aéreos han vertido más de un 1.600.000 litros de agua sobre la cumbre de Gran Canaria. "Es un incendio devastador, pavoroso y con un escenario que sobrecoge", ha lamentado por su parte la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, quien ha visitado este martes las zonas arrasadas por el fuego y ha destacado la seriedad ante la situación de las instituciones canarias y los cuerpos y fuerzas de seguridad que trabajan para acabar con el tercer incendio declarado en diez días en Gran Canaria.