PIDEN AYUDA MÁS TARDE, SOLAS Y CON PEOR SALUD
Las mujeres adictas al alcohol y otras drogas acuden más solas, más tarde y con la salud más deteriorada que los hombres a los programas contra las adicciones de la Asociación Proyecto Hombre, que pone de manifiesto la "invisibilización" de la mujer en este ámbito.
En los programas, el 80 % de los participantes es hombre y el 20 %, mujer, tal y como han señalado en una rueda de prensa la directora de Proyecto Hombre, Elena Presencio, en el marco de las XX Jornadas de la asociación bajo el título "Proyecto Género: Visión integral de la intervención en adicciones".
La edad media a la que acuden las mujeres adictas a los programas de la asociación se sitúa en los 40 años, dos más que la de los hombres, y en el 50 % de los casos es el alcohol la principal sustancia consumida -en ellos la cocaína es la prevalente-.
Comienzan a consumir más tarde que los hombres y suelen tener un nivel académico bajo, ya que dos de cada tres no han terminado la Secundaria, y se encuentran más problemas para conseguir un puesto de trabajo; si lo logran, muchas de ellas están a tiempo parcial, con lo que dependen de ayudas externas como la familia, amigos o la instituciones.
El 10 % de las que asisten a los programas de Proyecto Hombre tiene hijos, una cifra superior a los hombres, que apenas alcanza el 1 %, algo que también dificulta su acceso al tratamiento, según la asociación.
Cuando se deciden a dar el paso, tienen la salud más deteriorada, con problemas crónicos (el 41 % frente al 29 % de los hombres), que muchos de ellos están relacionados, según ha señalado el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Francisco Babín, que también ha acudido al acto, con el consumo de alcohol.
En este sentido, Babín ha enumerado problemas hepáticos y digestivos pero también el cáncer.
Toman más medicamentos de manera regular: el 35 % de las mujeres lo hace mientras que en los hombres es el 25 %, y tienen más problemas y trastornos mentales como la depresión o la ansiedad.
El 69 % de las mujeres asegura haber sufrido abusos emocionales (los hombres el 46 %), el 50 %, físicos (los hombres el 23 %) y el 27 % sexuales (los hombres el 4 %).
Solo en el caso de las conductas violentas, ellos superan a las mujeres y es que dos de cada cinco hombres llegan con causas pendientes con la Justicia por solo una de cada cinco de ellas.
Así las cosas, la directora de Proyecto Hombres ha subrayado que cuando se trata de mujeres adictas, precisamente la adicción les añade más vulnerabilidad y supone "un estigma que las sitúa en desventaja social".
"Mujeres doblemente rechazadas por acercarse a la ilegalidad e incumplir los roles tradiciones. 'Malas madres, malas hijas, malas esposas', invisibles, blanco de juicios y comentarios, que suponen una carga añadida que no se visibiliza igual en el caso de ellos", ha apostillado Presencio.
En este sentido, ha destacado que las mujeres anteponen las necesidades de los otros, como las de los hijos, a las suyas. "Son mujeres más solas, con menos apoyo familiar porque ellos frecuentemente vienen con sus madres y parejas y ellas, no".
Pero, ha sentenciado Presencio, son mujeres "valientes, luchadoras y que exigen ser miradas con otros ojos, los de una sociedad igualitaria".
Mujeres valientes como Rocío -nombre ficticio- que lleva siete meses de tratamiento en la asociación y que en una conversación con algunos medios ha reconocido que el camino no es fácil porque está lleno de cardos pero que al final se encuentra "el ramo de rosas".
Ella, que era politoxicómana según reconoce, aún no ha visto ese ramo pero sí "algún pétalo" desde que comenzó el tratamiento y anima a las que están como ella a dar el paso y acudir siempre arropadas por la familia a pedir ayuda