SE UNEN PADRES, EDUCADORES Y EXPERTOS
El consumo de alcohol entre menores no deja de aumentar y lo peor es que cada vez empiezan antes. En los meses de verano el problema se agudiza. Sólo en el último mes casi medio millón de chavales se ha emborrachado.
Así acaban muchos jóvenes españoles cuando salen por la noche: casi el 80% de los menores dice haber probado el alcohol y más de 700.000 reconocen consumirlo habitualmente en forma masiva. Por eso los tres sectores implicados, padres, educadores y expertos en prevención unen fuerzas: "Podemos y debemos trabajar juntos en lo fundamental, la educación", dice José María Alvira, secretario general de Escuelas Católicas.
Educación como pilar básico. Pero también cambios sociales: cuando todos beben es difícil explicar y entender que el alcohol no es bueno: "Cuando la sociedad estable una fórmula de relación social en que los niños y las niñas de 14 años salen los sábados hasta las seis de la mañana es muy difícil que los padres tengan que oponerse a una corriente global de todos sus compañeros", admite Ignacio Calderón, director general de la FAD.
Frente a esas corrientes, propuestas concretas. Como una nueva ley del alcohol y un mayor control de la venta y más sanciones para quien no cumpla la norma, propone Leticia Cardenal, presidenta de CEAPA: "Los chavales no pueden comprar con 15 años, con 13, bebidas en el chino de turno, todo eso debe estar controlado por la administración". Además los padres reclaman subidas de precio, y más programas de concienciación y formación para que esto deje de ser lo normal cuando se habla de diversión.