Plagas
La dueña de la casa empezó a ser consciente del problema en el mes de marzo, cuando comenzó a ver abejas muertas en el suelo.
Los dueños de una casa de Covelo, en la provincia de Pontevedra, están desesperados al tener que enfrentarse a una invasión de abejas que campan a sus anchas en su vivienda. Un problema que no surgió de la nada, ya que en la cámara de aire existían desde hace tiempo varios panales de miel y cada vez que llega la primavera, los insectos regresan para volver a utilizarlos. Un pequeño detalle que se pasó por alto el dueño a la hora de poner a la venta la casa.
El inmueble, de piedra y de arquitectura típica gallega, fue reformado en el año 2009. Sin embargo, durante esas obras, la cámara de aire quedó mal sellada. Desde ese momento, otros inquilinos que alquilaron la vivienda sufrieron también la visita de estos indeseados visitantes.
El problema comienza con la primavera
La dueña de la casa empezó a ser consciente del problema en el mes de marzo. En ese momento vio las primeras abejas muertas en el suelo. Con el paso de los meses el problema fue creciendo. En mayo, observaron cómo los insectos entraban por cinco puntos diferentes del tejado, agujereando incluso el encintado de la piedra.
Como consecuencia, los propietarios de la casa han tenido que utilizar únicamente la planta baja de la casa. Ante esta situación se encuentran desesperados ya que nadie les da una solución al tratarse de abejas de una especie protegida.
Se han puesto en contacto con numerosos organismos, empresas de control de plagas y con apicultores particulares. La respuesta es siempre la misma: si fueran velutinas, al tratarse de una plaga, se podrían exterminar. En cambio, en este caso, el único modo de que abandonen el inmueble es reparando el tejado, sellando de manera óptima la cámara de aire y retirando los panales. Por ello, los dueños están pensando en denunciar en el juzgado este hecho que se les ocultó en el momento de comprar la casa.