CATALUÑA | OPERACIÓN DE LA GUARDIA CIVIL
Los dos hermanos de nacionalidad marroquí detenidos este miércoles en Girona y acusados de la comisión de delitos de financiación de terrorismo yihadista, colaboración con grupo terrorista y autoadoctrinamiento, declararán este jueves por la tarde en la Audiencia Nacional, han confirmado a Europa Press fuentes jurídicas.
Los investigadores sospechan que ambos varones, de 33 y 22 años, empleaban canales establecidos por el grupo terrorista Daesh para remitir dinero destinado a facilitar los desplazamientos de operativos para su integración en las filas del grupo yihadista.
Los dos detenidos, junto a una tercera persona --otro hermano que se cree fallecido en Siria-- hacían llegar los fondos a los administradores de Daesh utilizando la intermediación de identidades falsas atribuidas a los gestores de la organización terrorista. Los primeros datos apuntan a que estas supuestas identidades forman parte del centro de captación económica internacional de Daesh, o de su aparato de financiación.
A pesar de las sospechas del fallecimiento del tercer hermano que se desplazó a zona de conflicto junto con su mujer y dos hijos para integrarse en Daesh, los envíos de fondos desde España no cesaron. Los arrestados acumulaban cantidades procedentes de sus ingresos, entre ellos el salario de uno de ellos, para remitirlas posteriormente a través de estos canales.
Este miércoles, la Guardia Civil ha registrado los domicilios de los dos detenidos. En ellos, se ha intervenido material informático que espera que sirva para encontrar "datos relevantes", que aporten un mayor conocimiento de las vinculaciones de los detenidos con los administradores financieros del Daesh, sobre las redes de financiación y apoyo financiero de la estructura en Europa de la organización yihadista, así como sus supuestas identidades.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado la busca y captura internacional del tercer vinculado con los hechos, ante las dudas sobre si falleció en zona de conflicto, y de su mujer, apuntan las mismas fuentes. Los detenidos vivían en Arbúcies (Girona), en dos pisos de las calles Germana Assumpta y Segimon Fogueroles, y hace años que trabajaban en empresas de la localidad.