Alimentación
Ser vegano o vegetariano no es cuestión de una moda o de seguir una dieta, es una cuestión de ética, una filosofía de vida. A continuación, te contamos las principales diferencias entre veganismo y vegetarianismo.
La preocupación por una buena alimentación aumentó en los últimos años junto a la práctica de ejercicio físico. Llevar una vida saludable para tener mejor calidad de vida y prevenir así la aparición de ciertas enfermedades ha ido calando en la sociedad, así como la protección del medioambiente y de los animales, sobre todo, en la industria alimentaria.
Muchas personas se opusieron a la producción cárnica en macrogranjas y a otro tipo de conductas vinculadas o catalogadas como crueldad animal, lo que llevó a cambiar los hábitos alimenticios: de ser proteína animal la protagonista de cada plato a quedar eliminada de la dieta con el veganismo y el vegetarianismo.
Ser vegano o vegetariano es una cuestión de ética, no es una dieta recomendada ni una moda a la que seguir: es un estilo de vida que se elige.
Hace décadas, los veganos y los vegetarianos eran minoría en la sociedad y apenas tenían oferta de productos en las grandes superficies ni en los restaurantes. Ahora, ya existen alimentos en los que en sus etiquetas lucen los términos de ‘vegano’ o ‘vegetariano’ y muchos establecimientos hosteleros se han especializado en platos en los que no existe presencia animal o permiten que cualquier receta de su carta pueda modificarse para satisfacer a todos los paladares.
La ética y el compromiso con los animales no solo se manifiesta en la comida, también en otros productos que se utilizan o se consumen en el día a día como pueden ser la ropa, el calzado, los cosméticos, los envases o elementos decorativos.
Muchas veces se confunden los términos vegano y vegetariano o se usan indistintamente, pero existen diferencias fundamentales entre ambas filosofías de vida.
Ser vegetariano implica excluir la carne o la proteína de la carne en la dieta para combatir la crueldad animal, la huella de carbono o pro convicción propia. Un vegetariano sí consume otros productos procedentes de los animales como la leche, el queso, los huevos o la miel.
Ser vegano es rechazar cualquier producto que proceda de un animal, dentro de la dieta como fuera de ella. La alimentación solo se basa en alimentos vegetales, nada que se proveniente del reino animal.
La distinción entre vegano y vegetariano comenzó a mediados del siglo XX en Inglaterra, ya que en los inicios se consideraba vegetariano a todo aquel que no consumía carne.
Aunque hay algunas personas que consumen algún tipo de pescado o que quizás no son tan estrictos con el etiquetado de los alimentos, los más puristas no consideran que quienes realizan estas prácticas sean veganos o vegetarianos.