Operación Kambo
A la pareja británica detenida se le imputa un delito de intrusismo profesional. Los agentes los pillaron in fraganti realizando rituales chamánicos con ayahuasca.
Una pareja británica de 47 y 52 años ha sido detenida en una casa rural de Yecla (Murcia) acusada de delitos de intrusismo profesional al ser capturados in fraganti como supuestos chamanes impartiendo un ritual con ayahuasca a 7 clientes.
Los detenidos se anunciaban a través de internet y ofrecían una casa de curación orientada a grupos de autodesarrollo de retiros chamánicos y de recuperación y desintoxicación de adicciones, entre otras cosas. En operación 'Kambo' se registró con autorización judicial la casa de campo. Los agentes de la Guardia Civil encontraron que se estaba celebrando un retiro de ayahuasca, hallando en una de las salas 7 camastros y 2 sillones desde donde los chamanes estaban dirigiendo el ritual y la ingesta de sustancias alucinógenas de 7 personas de varias nacionalidades.
Se trabaja con la hipótesis de que los considerados chamanes administraban sustancias sin control sanitario, llegando a producir en los asistentes una serie de efectos físicos que iban desde la sudoración, el mareo, náuseas o contracciones musculares que podían durar entre 8 y 12 horas, hasta complicaciones más severas de índole cardíaca.
El coste diario por cada cliente rondaba los 45 euros en estancias con un mínimo de 3 noches, también se contemplaban ofertas grupales de 500 euros diarios para 16 personas. En la misma habitación se hallaron tensiómetros dispuestos para atender cualquier eventualidad que pudiera surgir durante las citadas prácticas espirituales.
En el registro se incautaron 14 litros deayahuasca, una bebida usada en la medicina tradicional sudamericana por pueblos nativos que causa efectos alucinógenos, así como un bote de sananga, un colirio amazónico utilizado también en ciertas ceremonias para aumentar la percepción espiritual, 3 kilos de marihuana, 3 kilos de rapé, 29 botes de pipetas con extracto de marihuana, 44 piruletas y dulces con extracto de San Pedro, 304 cactus San Pedro y 200 gramos de setas alucinógenas.
Además se encontraron varias alas de jilguero (especie protegida), colocadas para ser disecadas en unas planchas de madera, supuestamente empleadas para la ornamentación de alguna de las herramientas y útiles. Por ello, se les atribuye un delito contra la flora, fauna y animales domésticos.