Azuqueca
La Guardia Civil detuvo este miércoles a un hombre de 23 años por un presunto delito de homicidio por imprudencia tras la intoxicación en un local de Azuqueca de Henares donde falleció una chica.
La justicia ha decidido dejar en libertad provisional al hombre que fue detenido por un presunto delito de homicidio imprudente y ocho delitos de lesiones, por los que ha sido imputado provisionalmente, a causa de la intoxicación que sufrieron siete jóvenes en Azuqueca de Henares, en Guadalajara, donde una de las asistentes falleció.
La detención tuvo lugar este pasado miércoles; al parecer, el hombre ocupó ilegalmente el local donde ocurrió el suceso con la intención de celebrar eventos en el interior. Además, manipuló el grupo electrógeno que causó las emisiones nocivas, el cual además se encontraba en mal estado, provocando la intoxicación de los adolescentes. Este viernes pasará a disposición judicial aunque todavía no se sabe los delitos que podrían imputársele.
El trágico suceso ocurrió la noche de Halloween, del domingo 31 de octubre al lunes 1 de noviembre, cuando una chica de 15 años falleció y otras ocho personas resultaron heridas, entre ellas dos agentes de la Guardia Civil, después de intoxicarse por monóxido de carbono, debido a la mala combustión de un grupo electrógeno del local de Azuqueca.
Cinco jóvenes siguen ingresados
Los familiares de uno de los siete jóvenes que asistieron a este local la noche de Halloween, preocupados al ver que el joven no regresaba ni lo localizaban a través del móvil, decidieron acudir a la Guardia Civil para informar de ello y aportaron la última localización del móvil, lo que llevó a los agentes al citado local.
La Guardia Civil, una vez en el local, al mirar por la ventana, vieron que había gente en el interior, pero que no se movían, procedieron a romper los cristales y cuando entraron vieron a siete jóvenes inconscientes, todos ellos por culpa del monóxido de carbono. Actualmente, cinco de ellos permanecen ingresados, uno en la UCI, dos en planta y dos en condiciones no reveladas por el momento.
Los dos primeros guardias que entraron también se vieron afectados por los gases tóxicos y tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos. Uno de los jóvenes sigue ingresado en la UCI del Hospital de Guadalajara, otros dos están en planta en este mismo centro sanitario y dos más están hospitalizados en centros de la Comunidad de Madrid.