Sevilla
La Guardia Civil ha detenido a tres personas que trabajan en una gasolinera de Coria del Río, en Sevilla, por su supuesta implicación en un delito contra el medio ambiente y los recursos naturales con afección grave a la salud de las personas, que ha causado lesiones a mas de 200 vecinos de la barriada Guadalquivir.
La investigación comenzó hace dos años por el el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tras recibir una denuncia la Fiscalía de Urbanismo, Medio Ambiente y Patrimonio Histórico de la Audiencia de Sevilla.
Los vecinos residentes en la barriada del Guadalquivir presentaron una denuncia por las molestos olores a hidrocarburos que desde 2017 sufren en el interior de sus viviendas, provocando dolencias tanto físicas como psíquicas.
Tras las comprobaciones pertinentes se comprobó que las mediciones en el interior de algunas de las viviendas de la barriada tenían presencia de compuestos orgánicos volátiles (COV) derivados de hidrocarburos, así como Sulfato de Dimetilo, muy tóxico por inhalación. Además los guardia civiles detectaron un vertido de hidrocarburo cerca de la gasolinera.
En el informe se indica que las empresas encargadas del saneamiento de la localidad, Emasesa, y Aljarafesa, se detecta la existencia de distintas grietas en la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de la zona.
Los agentes han tomado manifestación en calidad de perjudicados a más de 200 vecinos de dicha barriada. Además de que como consecuencia de los escapes de hidrocarburos tipo gasolina, gasoil y aceites minerales, se ha producido un daño sustancial en el medio ambiente.