SE LES ACUSA DE CINCO DELITOS
Llevaban dos cursos cambiando sus notas, cambiaban los suspensos por muy buenas calificaciones y nadie sospechó nada hasta que descubrieron un programa espía instalado en uno de los ordenadores de la Universidad Politécnica de Valencia. Fue entonces cuando comenzó la investigación de la Policía Nacional, que de momento concluye que falseaban sus expedientes, nunca los de otros estudiantes, y guardaban las claves de 40 docentes, muchos de los cuales iban a ser sus profesores en cursos posteriores.
Victoria Ramos, portavoz de la Policía Nacional, explica que con el software que instalaron interceptaban las pulsaciones en el teclado de los equipos informáticos. Los expertos alertan de que, de este modo, además de las claves al sistema de la universidad, los dos chicos pudieron tener acceso a otros datos, como los bancarios.
Con las claves en su poder, los estudiantes sólo tuvieron que hacer a las actas y modificar todas sus notas. Además, interceptaban el mensaje que se envía al profesor cuando se cambian las calificaciones, por lo que nadie se enteró de lo que estaba sucediendo. Además, no se conformaron con el aprobado y se pusieron las calificaciones más altas.
Los dos jóvenes de 20 años, que ya han sido detenidos, se enfrentan a cinco delitos, uno de ellos el de revelación de secretos.