Málaga
Un individuo de 50 años fue detenido cuando una persona en la playa se percató que grababa a mujeres en bikini sin su consentimiento. Cuando la policía le arrestó, descubrió en su teléfono móvil vídeos, en los que se veía partes íntimas de varias pacientes que acudieron a la clínica ginecológica en la que trabajaba.
La Policía Local de Málaga ha detenido al recepcionista de una clínica ginecológica acusado de presuntamente haber accedido y robado imágenes íntimas de varias de las pacientes que acudieron a su centro.
El arresto se ha producido después de que una persona le increpara en la playa tras percatarse de que grababa a mujeres en bikini sin el consentimiento de estas. Cuando los agentes interceptaron al individuo, descubrieron que, además de tomar imágenes en la playa, el hombre poseía imágenes íntimas de mujeres que acudían a la clínica ginecológica en la que trabaja.
Delito contra la intimidad y el derecho a la propia imagen
El detenido, un individuo de 50 años, se le imputan delitos contra la intimidad y el derecho a la propia imagen como presunto autor de los hechos, como ha afirmado el pasado martes la Policía Local de Málaga a través de un comunicado.
El arresto se produjo tras una acalorada discusión entre en un hombre y el detenido, cuando el primero se percató que este grababa a chicas en bikini sin su consentimiento, por lo que llamó a la policía. Además, varias de las víctimas grabadas en la playa de La Malagueta podrían ser menores de edad, lo que motivó una serie de recriminaciones. El hombre se dio a la fuga, pero los agentes, vestidos de paisano, le localizaron dos horas más tarde gracias a la descripción que habían realizado los testigos.
Los vídeos pudieron ser compartidos
Los agentesrequisaron al detenido una cámara de vídeo, cuyo objetivo estaba cubierto con la idea de disimular cuando grababa, cinco tarjetas de memoria y un teléfono móvil. Además, en el terminal encontraron varios archivos de vídeo, en los que se veía partes íntimas de varias pacientes que acudieron a la clínica ginecológica en la que trabajaba, en una carpeta de una aplicación de mensajería instantánea, lo que hace suponer a la policía que pueden haber sido compartidos.