Detención
También detuvo a las dos personas que presuntamente le habrían robado material de construcción.
Los vecinos de Allo comentan que fue la desesperación lo que llevó el hombre a acudir con una escopeta a la vivienda de sus presuntos ladrones. Una mujer nos señala que estaba harto y que le están venga a robar. Un familiar suyo nos subrayaba que ha sido víctima de los robos de las mismas personas en unas diez ocasiones. Esta vez le robaron material de construcción de la obra en la que trabajaba. Un hombre nos comenta que, en concreto, le robaron un martillo de percusión que ya le habían sustraído en al menos otras dos ocasiones y que ese día no pudo más y explotó.
El hartazgo en la localidad navarra es absoluto. Un vecino nos asegura que no puede ser que estén robando en todas partes. Un día en un sitio otro día en otro. Otro hombre subraya que los robos son continuos. Roban en bajeras y en bares como el que regenta Ana Gómez. Ella nos relata como los ladrones entraron reventando una puerta, cogieron las máquinas tragaperras, las cargaron y se las llevaron.
Pero también actúan en las viviendas. Un hombre nos comenta que ya incluso entran en las casas habiendo gente dentro. Otra vecina nos señala que, en poco tiempo, le han robado dos lámparas de la puerta. Por último, otro nos asegura que siente miedo al pensar que le pueden entrar en casa. Lo último que han robado son varias tapas de alcantarilla situadas muy cerca de un colegio, con el peligro que ello conlleva. El Ayuntamiento ha tenido que señalizar los agujeros del suelo.
Los vecinos piden al Consistorio que haga algo. Uno de ellos nos comenta que lo único que quieren es vivir en paz y que la gente que está robando se vaya a otra parte. La alcaldesa reunirá en los próximos días a la junta de seguridad para estudiar las medidas a adoptar. Mientras, se ha convocado una manifestación contra los robos y en apoyo al vecino detenido. La policía foral la acusa de varios delitos. Uno por allanamiento de morada, otro de lesiones y uno más por amenaza con arma de fuego.
Los Mossos d’Esquadra han detenido a un ladrón multirreincidente acusado de cometer varios robos con violencia en establecimientos de Barcelona durante los últimos meses.
Según apuntan los Mossos d'Esquadra, el detenido siempre actuaba con el mismo modus operandi: entraba cubierto en comercios donde solo había un trabajador, los amenazaba e intimidaba, en ocasiones con un cuchillo de grandes dimensiones y, en otras, incluso con un arma de fuego que llevaba escondida en la ropa. Y bajo amenazas, obligaba a los empleados a entregarle todo el dinero de la caja registradora.
Entre sus objetivos se encuentran establecimientos de todo tipo, como peluquerías y farmacias. Uno de los atracos ocurrió en una farmacia a las dos de la tarde. Allí amenazó con una pistola a las dos trabajadoras que se encontraban en ese momento. Valeria, una de las empleadas a las que atracó, explica que “entró cuando no había nadie y fue directamente a la caja a por el dinero”. Sin embargo, al no encontrar efectivo, el ladrón decidió abandonar el lugar. Valeria añade que "alguien lo estaba esperando fuera con una moto para facilitar la huida".
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