El conductor, de 23 años, triplicaba la tasa de alcohol permitida
En Sevilla ocurrió en las inmediaciones de la discoteca EM, un lugar donde los jóvenes se concentran para practicar botellón. A las seis de la mañana y con la calle aún llena de gente uno de los jóvenes, que iba pasado de alcohol, se dedicó a hacer trompos con el coche. En uno de sus alardes perdió el control del vehículo atropellando a Silvia Reyes y a dos de sus amigas. Ni siquiera se bajó a ver cómo estaban. Alertada por un vecino, la Policía Nacional estableció inmediatamente un dispositivo de búsqueda. El conductor fugado, que tiene antecedentes por atentado contra la autoridad, fue detenido. El otro suceso ocurrió en el municipio pontevedrés de Redondela y también cerca de una conocida discoteca, sólo que esta vez la víctima es un menor de 15 años que se encuentra en coma. El conductor , de tan sólo 19 años, también en este caso se dio a la fuga aunque dos horas más tarde fue detenido. La prueba de alcoholemia demostró que duplicaba la tasa permitida