SE HA PODIDO SEPARAR DE UN GRUPO DE LA CORNISA CANTÁBRICA
Unas fotografías son la prueba: un joven oso pardo busca la miel de unas colmenas en Zamora. Un apicultor había denunciado ataques a sus abejas desde Mayo. Gracias a las cámaras de foto trampeo se ha confirmado la existencia del oso en esta zona de Carballeda. Se cree que ha podido separarse de un grupo en la cornisa cantábrica y llegar a Zamora atravesando los montes de León.
La técnica de la foto trampeo se utiliza en Cantabria y Asturias para seguir y censar los osos. Gracias a las cámaras se pueden detectar animales heridos. Ahora, esta técnica también ha ayudado a los apicultores a cobrar sus indemnizaciones. Si un animal protegido produce daños, los abejeros reciben compensaciones.
Cerca de 200 osos pardos han sido censados y se ha triplicado la población en los últimos 20 años. Ahora, uno aventurero ha emigrado hacia el Sur. Quién sabe si ha abierto camino a los demás.