EN MADRID
La Policía Nacional han desmantelado un club clandestino en el que se celebraban torneos de póker ilegales en la localidad de San Sebastián de los Reyes y los investigadores que han llevado a cabo la intervención han identificado a un total de 28 jugadores que realizaban apuestas.
Según ha informado la Dirección General de Policía, uno de los jugadores identificados y que hacía también las veces de croupier portaba en el momento del registro 1.750 euros, cantidad que coincide con el precio fijado para la inscripción y el número de jugadores presentes.
A tenor del número de jugadores y las sanciones impuestas a las infracciones cometidas por el torneo contra la legislación del juego, el montante de éstas podría rebasar los 100.000 euros. De hecho, en Madrid la participación en una "timba clandestina" lleva aparejada una sanción para el jugador de más de 3.000 euros, y para el organizador de dicha actividad, entre 9.000 y 600.000 euros.
Las investigaciones se iniciaron tras recibir por parte de la Dirección General de Ordenación del Juego una comunicación en la que se informa de la próxima realización de un torneo de póker que carecía de los requisitos que estipula la legislación vigente. El encuentro iba a tener lugar el pasado 14 de agosto en San Sebastián de los Reyes.
Inmediatamente los agentes organizaron un dispositivo con el fin de localizar el lugar en el que se iba a llevar a cabo el torneo y proceder a la comprobación la celebración del torneo ilegal. El día de la partida, los investigadores desplegados en el lugar observan cómo a la hora que se tenía fijada para el inicio de la partida, alrededor de unas cuarenta personas entran en el local de forma progresiva. Debido a que la vigilancia mostraba indicios claros de que en el local pueda estar llevándose a cabo la realización de las partidas de póker ilegales, se decide entrar en el mismo para inspeccionarlo.
28 jugadores identificados
Los agentes comprueban que, efectivamente, en el interior del establecimiento se está realizando un torneo ilegal de póker donde se estaba jugando simultáneamente en tres mesas, identificando a 28 jugadores que estaban participando en la partida ilegal.
Además se recontaron las fichas que tenía en ese momento cada jugador y se intervinieron por parte de los agentes diversos naipes y útiles para jugar al póker. Uno de los identificados, que realizaba las veces de croupier, portaba en el momento del registro 1.750 euros, cantidad que coincide con el número de jugadores que estarían participando y el precio fijado para la inscripción. Este hombre, además de realizar las veces de croupier en su mesa, disponía de un ordenador portátil en el que controlaba el tiempo del juego de las tres mesas. De todo esto se realizó el acta correspondiente que se remitirá a la Dirección General de Ordenación del Juego, con objeto de que lleve a cabo la pertinente sanción administrativa.
Servicio de control de juegos de azar
La Policía Nacional detalla que en España, en valores brutos, anualmente se juega por valor de unos 42.000 millones de euros, de los cuales el 80 por ciento aproximadamente, se distribuyó en premios. Los juegos de azar se encuentran regulados legalmente por la Dirección General de Ordenación del Juego, siendo la Policía Nacional quién vela porque el juego sea seguro y los jugadores actúen de un modo responsable.
Para ello existe el Servicio de Control de Juegos de Azar y Apuestas dentro de la Unidad Central contra la Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría General de Policía Judicial. Entre sus funciones se encuentra la inspección de locales, salones de juego, casinos y bingos, así como la coordinación de dicha labor en toda España. En total, y de manera regular, se inspeccionan en toda España por los integrantes del Servicio de Control del Juego: 53 salas de Casino, 310 salas de bingo, 3.150 salones de juego y 330.000 máquinas 'B' en España (salones y hostelería), entre otros.
Control de acceso a locales de juego
Para lograr que el juego sea seguro y se haga de forma responsable, la Policía Nacional se encarga de verificar que se cumple el control de acceso a los locales de juego, de modo que no pueda entrar nunca un menor en uno de estos lugares y, por supuesto, que no pueda jugar.
La sanción en Madrid, por ejemplo, para un menor que sea detectado en un local, jugando, puede alcanzar los 3.000 euros y para el establecimiento en el que está jugando el menor, hasta 9.000 euros.