SE HABÍAN 'DIVIDIDO' LAS CARRETERAS COMARCALES DE CASTELLÓN Y VALENCIA
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado dos redes criminales, integradas por ciudadanos de origen rumano, que controlaban la prostitución en diversas carreteras comarcales de Castellón y Valencia.
Los responsables de estas organizaciones habían hecho un "pacto de no agresión" por el que dividían las citadas carreteras en dos zonas para situar a "sus" chicas.
Los dos grupos contaban con el soporte económico de un prestamista que se encargaba de financiar las actividades ilícitas de ambos.
En total se ha detenido a veinte personas, todas ellas de nacionalidad rumana, responsables e integrantes de las dos organizaciones.
Además, se ha identificado a once víctimas que estaban siendo explotadas por ambas organizaciones.
Estas redes no dudaban en utilizar la violencia tanto contra las víctimas -para obligarlas a ejercer la prostitución en su beneficio- como contra otros grupos rivales dedicados a la trata, llegando incluso a lesionar a algunos de sus miembros.