SE HAN DETENIDO A ONCE PERSONAS
La banda se organizaba en dos células dedicadas también a cometer hurtos en entidades bancarias o a clientes que acababan de hacer algún reintegro importante de efectivo.
Los arrestados utilizaban documentaciones de Guatemala, México, Colombia y Venezuela para alquilar vehículos y hospedarse en hoteles en los diferentes puntos del país donde operaban.
En los registros practicados se han recuperado joyas por valor de 300.000 euros, 20 relojes de gama alta, varios teléfonos móviles, cámaras de fotos y diversa documentación.
Los miembros de la banda seleccionaban a sus víctimas y las sometían a vigilancia durante varios días, utilizando en muchos casos sistemas de vigilancia electrónicos -balizas- para controlar el movimiento de sus vehículos.
Tras obtener las rutinas de sus objetivos, preferiblemente representantes de joyería, seleccionaban el momento adecuado para apoderarse de todas las joyas que portaban en el vehículo, aprovechando un descuido y utilizando sistemas para inhibir las alarmas, preferiblemente sin utilizar la violencia.
Las dos células se movían constantemente por el territorio nacional utilizando vehículos de alquiler que cambiaban frecuentemente.