Sevilla
La Policía Local de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) desalojó la noche del pasado sábado al domingo un local de copas en dos ocasiones, la primera por funcionar más allá del horario máximo permitido generando molestias a los vecinos y la segunda por incumplir el desalojo inicial y continuar con su actividad, con la particularidad de que tenía a 25 clientes "escondidos" en una habitación para eludir la acción policial.
Los agentes acudieron al citado local ante denuncias vecinales por el elevado volumen de la música del negocio, ordenando el desalojo del mismo al comprobar que estaba funcionando más allá del horario límite permitido.
Pero tras nuevos avisos de los vecinos, los agentes regresaron al local, donde el propietario negaba que el mismo estuviese abierto, alegando que dentro sólo estaban algunos trabajadores con un volumen de música que "no molestaba". Los agentes inspeccionaron el establecimiento, descubriendo que en una de las habitaciones del fondo del local había unas 25 personas "escondidas" con vasos de bebida en sus manos.
La Policía Local ha decidido denunciar al propietario del negocio y a los citados clientes.