GALICIA | HISTORIA DE SUPERVIVENCIA
Se salió con el coche por una pista de tierra y voló aproximandamente unos 70 metros de caída libre hasta terminar en el caude de un río.
Perdió la consciencia... cuando la recuperó salió del vehículo. Comenzó entonces a andar, vagando por el bosque, perdido, con tan mala suerte que escogió el camino equivocado. La noche caía y la niebla era cada vez más densa.
Durante las 20 horas que Benedicto Tejeda estuvo vagando por el monte, la lluvia no paraba de arreciar. Afortunadamente, y en medio de la nada, encontró un coche abandonado en el que pudo pasar la noche. Ya con luz de día, continuó su camino andando cerca de 15 kilómetros hasta encontrar una casa.
José Luis es la persona que le auxilió. Viendo cómo fue el accidente, nadie puede negar que Benedicto volvió a nacer.