Islas Canarias
Varios vecinos del municipio de Tijarafe, una de las localidades afectadas por el incendio que desde el pasado sábado asolaba la isla, alertaron este mediodía a las autoridades de otro conato que ha vuelto a activar a los servicios de emergencias.
Este nuevo fuego ha sido detectado en la zona sur del Barranco del Jurado, y no guarda ninguna relación con el incendio forestal en Puntagorda, que llegó a afectar a La Caldera de Taburiente. Ese incendio ha sido declarado como controlado, según la información proporcionada por el Gobierno de Canarias. A consecuencia de este avance positivo, el nivel de alerta en la jornada de hoy continúa en 1, lo que supone un importante cambio en la gestión de la situación, ya que es el propio Cabildo de la isla el que ha asumido la dirección de las operaciones de extinción utilizando los recursos propios de La Palma.
El incendio en el que intervinieron más de 500 profesionales en tierra y 11 medios aéreos tuvo origen en la madrugada del sábado, y avanzó durante el día afectando áreas de transición entre zonas urbanas y forestales. Debido a su peligrosidad, más de 4.000 residentes fueron evacuados siguiendo el censo, sin embargo, en su mayoría, la gran cantidad de afectados recibió el martes el permiso para regresar a sus hogares.
Las llamas arrasaron casi 3000 hectáreas, varias bodegas, viñedos y 22 viviendas, como la del vecino de Puntagorda, Alfonso Ballesteros que ha relatado a un equipo de Antena 3 cómo abandonó su casa in extremis. “Fue mi mujer la que, pasada la una de la madrugada, me advirtió desde la azotea de la presencia de las llamas en lo alto de la montaña. A los pocos minutos el fuego ya había avanzado muchísimo. Sólo nos dio tiempo de coger a los dos niños (de 4 y 6 años) y salir”. Afortunadamente pudieron salvar la vida, pero su hogar quedó reducido a escombros.