EN UNA OPERACIÓN DE LA POLICÍA NACIONAL Y LA GUARDIA CIVIL

Cuatro detenidos en una operación contra una banda dedicada a robos con violencia en Málaga

Los detenidos habían asaltado de forma violenta y con intimidación diversos establecimientos en la provincia de Málaga. Además, se dedicaban al robo de motocicletas que posteriormente vendían por piezas o utilizaban para cometer los robos. Los detenidos ocultaban su rostro con cascos, gorras o capuchas llegando incluso a hacerse pasar por agentes de la Policía Nacional.

Cuatro personas de nacionalidad española, marroquí e italiana han sido detenidas en una operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Nacional como presuntas integrantes de un grupo criminal, que estaba asentado en Mijas, y al que se considera presunto autor de quince robos con violencia e intimidación con armas de fuego en Málaga.

La investigación se inició el pasado mes de febrero a raíz de que en un breve periodo de tiempo fueran asaltados de manera violenta varios establecimientos comerciales en las localidades de Mijas, Fuengirola, Benalmádena, Marbella y Estepona.

Los investigadores averiguaron que, además de los asaltos en establecimientos, la red se dedicaba al robo de motocicletas que utilizaban posteriormente para cometer los robos o para venderlas por piezas. El procedimiento que seguían los detenidos era el siguiente: contactaban con los vendedores de motocicletas que estaban ofertadas en páginas de segunda mano y, cuando acudían a la compra de la motocicleta, sustraían los vehículos utilizando la violencia si para, seguidamente, darse a la fuga.

Para evitar ser reconocidos los detenidos ocultaban sus rostros con cascos de motoristas, gorras o capuchas cuando cometían los robos. Es más, en uno de sus robos, uno de los detenidos llegó a hacerse pasar por agente de la Policía Nacional, para lo que vestía una camiseta con el anagrama de este cuerpo e hizo uso de una placa de identificación policial falsa.

La detención se precipitó cuando los investigadores comprobaron, durante las tareas de vigilancia, que los delincuentes estaban preparando su siguiente golpe y seguían los movimientos de un conocido empresario de Benalmádena al cual pretendían atracar días después. Tras la puesta a disposición judicial de los detenidos, el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Fuengirola decretó el ingreso en prisión de los dos principales miembros del grupo criminal.

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