¿Cuáles son los síntomas de los golpes de calor y cómo pueden evitarse?

Nuestra temperatura corporal es de 37 grados, sea cual sea la del exterior. El problema llega cuando esa temperatura exterior se convierte en la de nuestro organismo. Ese es el temido golpe de calor.

Cuando el organismo deja de tener la capacidad de regular esa temperatura se produce un aumento de la misma y, cuando llegamos a una temperatura de aproximadamente 39-40 grados es cuando se producen los primeros síntomas del golpe de calor.

El primer síntoma es la sed y este hay que subsanarlo rápidamente, porque si no desemboca en náuseas, mareos y consecuencias más graves como problemas neurológicos que en casos extremos pueden llevar incluso al coma.

Los perfiles de riesgo son ancianos, los niños y quienes trabajan al aire libre, aunque la mayoría de los avisos que reciben los servicios de emergencia son de turistas.