140 menores iban en el barco
En el Aquarius viajaban 140 menores, de los que 77 llegaron con sus madres y hay otros 123 niños, la mayoría varones, de entre 12 y 17 años que van a ir a centros de primera acogida.
Lo primero que se comprueba es que sus familias de origen no les buscan, ya que la mejor solución para ellos es volver con sus padres. Cabe la posibilidad de un secuestro o que se hayan subido al barco sin permiso de sus progenitores.
La adopción no se contempla, porque la mejor solución para ellos es una familia en régimen de acogimiento, algo que tampoco es inmediato.