LOS ECOLOGISTAS LOS SUELTAN POR LA NOCHE
Las jornadas de trabajo de los criadores de visones son de 24 horas, de día con los animales y de noche como vigilantes. Los continuos ataques de activistas a sus granjas no les dejan dormir, por lo que deciden hacer guardias. Las sueltas masivas de visones han supuesto a los criadores pérdidas incalculabres, y no entienden el por qué de estos asaltos.
"Son actos de vandalismo económico, porque atacan nuestro medio de vida, y de maltrato animal porque la mayoría de los animales se van a morir en libertad y un atentado ecológico", explica un granjero. Los visones están catalogados como especies invasoras, y la cría de este mustélido se ha convertido en un negocio muy rentable en Galicia.