Coronavirus
El coronavirus ha cambiado nuestra forma de planear las vacaciones de verano ya que muchas playas tendrán un aforo limitado. Además de eso, habrá que guardar una distancia de seguridad entre los veraneantes para lo que se ha creado un aro, hecho de lona sintética, de dos metros y medio de diámetro capaz de albergar a dos personas.
Su inventor, un ingeniero español, asegura que es una solución estética y también económica para mantener la distancia de seguridad este verano. Su precio rondaría unos 15 euros.
A partir de la fase 2 de la desescalada, según establece el Ministerio de Sanidad, se puede ir a la playa para realizar actividades deportivas, profesionales o de recreo de manera individual y sin contacto físico.