Rave
Dos personas han sido detenidas por los Mossos d'Esquadra, aunque ya han sido puestas en libertad.
La 'rave' del Sarral que comenzó este viernes por la noche ha llegado a su fin. Los cientos de asistentes, procedentes de toda Europa, que se han desplazado hasta el municipio de Tarragona han comenzado a irse tras 48 horas de fiesta.
Durante el fin de semana se instalaron varios controles de acceso para negar el paso a la llegada de más personas a la fiesta ilegal. En los controles que los Mossos d'Esquadra realizaron durante este sábado consiguieron denegar el acceso a cerca de 200 coches.
Al igual que a su llegada, las personas congregadas en una zona boscosa del municipio, en el entorno de la ermita de Sants-Metges, han ido abandonando la zona en autocaravanas, furgonetas y camiones.
Dos personas detenidas en los controles de acceso
Al detenido de este sábado se le suma otra persona más. La primera fue detenida por intentar saltarse uno de estos controles que los Mossos han estado llevando a cabo y, también, por pegar a uno de los agentes. La segunda detención se ha producido por peligrosidad y por consumo de sustancias estupefacientes. Asimismo, ambos detenidos han quedado en libertad.
Durante los controles de alcoholemia y de drogas que los agentes están realizando, también se han tramitado cinco denuncias por drogotest positivo y seis por no disponer de la ITV.
La 'rave' fue organizada de manera anónima y clandestina. "Entre nosotros nos invitamos. Montamos nuestra fiesta en el aire libre. Lo dejamos todo igual de limpio que como lo hemos encontrado", afirma uno de los asistentes.
Los vecinos del Sarral, el municipio más cercano a esta fiesta ilegal, son quienes más lo sufren. "No han pedido ningún tipo de permiso ni han hablado con el Ayuntamiento, entonces no me parece muy bien", dice un vecino. Además, lo que les preocupa es el riesgo de incendio al estar desarrollándose la fiesta en una propiedad de cultivos privada.
7.000 personas congregadas en el entorno de una ermita
Durante la tarde noche del viernes, unas 7.000 personas se congregaron en Sarral para dar comienzo a una 'rave' que se está desarrollando en el entorno de la ermita de Sants-Metges.
Los asistentes llegan bien preparados para su estancia. Por ello, se han llevado gran material, aunque parte de él ha sido requisado por los agentes como, por ejemplo, unos altavoces.
Por el momento no se sabe hasta cuando estarán disfrutando de esta fiesta ilegal. Se cree que solo durará este fin de semana, pero el intento de cientos de coches por entrar hasta la ubicación continúa. Hay quienes lo intentan a pie, pero desde el punto de control de los Mossos hasta la 'rave' hay 6 kilómetros, una hora y media caminando.