EL ANIMAL PODRÍA ESTAR HERIDO
Vecinos de la localidad zamorana de Carbajales de Alba han proseguido sin éxito la búsqueda de un toro que se escapó hace ya diez días de un festejo tradicional celebrado con motivo de las fiestas patronales de este municipio cabecera de comarca.
El astado, de nombre Camarero, escapó el jueves día 10 de septiembre del último de los espantes de las fiestas y aunque hasta ahora se ha especulado con varios lugares en los que podía encontrarse nadie ha logrado dar con él, según ha explicado el alcalde de la localidad, Manuel Fidalgo.
De nada han servido por el momento ni las batidas efectuadas por voluntarios del pueblo en diversos puntos del término municipal ni los recorridos realizados por agentes del Seprona de la Guardia Civil para intentar dar con pistas que puedan desvelar la zona en la que se encuentra el astado.
El toro, criado en una ganadería de la localidad salmantina de Martín de Yeltes, es buscado tanto en Carbajales como en localidades próximas como Muga de Alba o Losacino.
La hipótesis inicial que barajaban desde el Ayuntamiento es que el astado se hubiera escondido en algún lugar de espesa vegetación cercana al embalse de Ricobayo, pero al pasar el tiempo no descartan otras posibilidades como que haya caído a un hoyo, a un pozo o que tenga una pata rota.
El alcalde, que ha vuelto a recorrer a caballo diversos lugares del municipio para intentar dar con el toro, ha confesado que el tiempo transcurrido sin que nadie haya avistado al toro es mucho.
Ha asegurado además que los vecinos no tienen miedo y aunque tomen sus precauciones no han dejado de realizar salidas al campo, bien a pescar a orillas del embalse o a recoger moras.
Manuel Fidalgo ha recordado que es relativamente frecuente que escapen toros de los festejos taurinos de Carbajales de Alba y que los vecinos están habituados a ello, ya que "desde que tengo uso de razón habrá ocurrido treinta o cuarenta veces", ha declarado.