Abuso sexual
La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a catorce años de prisión y ocho de libertad vigilada a un hombre que abusó durante tres años, y "en multitud de ocasiones", de una hija de corta edad que utilizó como "un juguete sexual" y a la que no podrá acercarse a menos de 500 metros por tiempo de diez años.
La sentencia condena también al procesado a indemnizar a la menor con 50.000 euros por los daños morales sufridos. Dice la Sala que los hechos fueron descubiertos por la madre en febrero de 2018 cuando al volver a casa del trabajo vio a la niña con los ojos llorosos y le preguntó qué es lo que había ocurrido, confesándole aquella los abusos a los que era sometida por el padre.
Afirma también el tribunal que los abusos, durante los cuales al acusado no le importaron los gestos de dolor de la niña, se produjeron tanto en el domicilio familiar como en las proximidades de un colegio, en el coche y en otros lugares.
La sala considera que los hechos quedaron demostrados no solo con el testimonio prestado por la niña, sino, también, con las corroboraciones periféricas aportadas en el juicio, para añadir que no se ha probado la existencia de móviles espurios en la denuncia presentada por la esposa del
El tribunal, por otro lado, ha decidido también retirar a este la patria potestad no solo de esta hija, sino también de otra igualmente menor de edad.