15 AÑOS DE CÁRCEL
La sentencia prohíbe al acusado a aproximarse a su hija a menos de 1.000 metros durante un periodo de 10 años.
Según el escrito del Ministerio Fiscal, cuando la menor cumplió ocho años el hombre, "con el propósito de satisfacer sus deseos sexuales", comenzó a realizarle tocamientos a la niña y a masturbarse en su presencia, al menos, "tres o cuatro veces por semana".
A partir del momento en el que la menor cumplió 16 años, mantuvo relaciones sexuales completas con ella en más de tres ocasiones, que la joven consentía "por el miedo que le inspiraba su padre".
La adolescente abandonó el hogar familiar a los 21 años y en febrero del año pasado contrajo matrimonio con su novio. Como consecuencia de los hechos, estuvo sometida a diversos tratamientos de salud mental