Vacaciones
Esta semana termina el curso escolar y comienzan las vacaciones de verano, pero hay padres que tienen que trabajar. Para muchos comienza una misión imposible.
Se acaba el curso y los niños tienen por delante tres meses sin colegio. Tanto tiempo da para mucho, pero en muchos casos, también supone un gran esfuerzo para los padres, que tendrán que compatibilizar estos meses su horario laboral con la nueva situación de los más pequeños, además de algunas dudas.
La oferta de actividades de verano dirigidas a los niños cada vez es más amplia: talleres, campamentos, estancias deportivas… Todas estas son un gran recurso para muchas familias durante las vacaciones escolares, a la vez que un obstáculo para aquellas que no pueden acceder a ellas.
Por eso, familias como la de David, padre y consultor, piden que se legisle: ''El principal problema es que los horarios laborales no están adecuados. Una mayor conciliación podría ocurrir si se empezará a legislar con respecto a ese calendario escolar con la posibilidad de adaptar los horarios de trabajo o incluso teletrabajo durante los meses que duraran las vacaciones''.
Aunque no es tan fácil estar en casa con los niños y teletrabajar. En España no existen permisos que faciliten la conciliación solo excedencias sin sueldo de un mínimo de cuatro meses que se extienden más allá del verano.
También existe la opción de los abuelos para aquellos que los tienen cerca, o para los que tienen la suerte de que sus abuelos pasen el verano en un apartamento en la playa, en el camping o simplemente en el pueblo pero para los que no tienen ninguna de estas alternativas el verano se hace muy largo.
Lo más importante es tratar de disfrutar el tiempo con los hijos. El ingrediente fundamental de las vacaciones escolares debería ser un tiempo para la diversión de toda la familia, para no terminar necesitando unas 'vacaciones de las vacaciones'. Además de ser un espacio para que todos, padres e hijos, descansen.