Dietas saludables
Unas vez pasadas las fiestas de Navidad, tenemos que empezar a poner nuestra vida en orden después de tantos festejos y, entre muchas otras resoluciones de Año Nuevo, siempre aparece la famosa de "adelgazar después de la Navidad". Ya sabemos que es una tarea complicada ya que venimos de unos días en los que nuestro estómago se ha acostumbrado a comer más de la cuenta, pero, sin duda, es posible si le ponemos intención y seguimos una serie de consejos como los que te presentamos a continuación.
En primer lugar, es necesario trazarse un plan que nos permita tener claro en todo momento cual es nuestro objetivo. Sobre todo, para evitarnos promesas imposibles o para no ilusionarnos con metas que no vayamos a cumplir nunca. Aunque, lo más importante, es que consigamos, acudiendo a un experto en nutrición, un plan que no ponga en riesgo, nunca, nuestra salud.
No es necesario dejar de comer para adelgazar, es más, dejar en ayunas a nuestro cuerpo nos genera más ansiedad y provocará que cuando comamos seamos incapaces de saciarnos. Es, por ello, que es muy importante que al inicio de cada semana nos dejemos preparado un menú para toda la semana así tendremos unas pautas bien marcadas y sabremos siempre cuándo y qué comer. Sin embargo, la clave para adelgazar después de las navidades es la constancia. Es decir, tener claro que queremos adelgazar y que vamos a conseguirlo.
Ideas para un menú sano
En el desayuno, una buena idea es sustituir las tostadas de plan blanco o de moldo con mermelada o mantequilla por algo un poco más saludable. Es preferible pasar a desayunar una tostada de pan integral o de centeno con unas rodajas de aguacate con una loncha de pava por encima acompañándolo de fruta natural y no de zumo, para evitar azúcares añadidos.
A media mañana es muy recomendable tomar barritas energéticas y si pueden ser caseras. Estas sacian mucho más que cualquier otro alimento, tienen un alto contenido en fibra y su azúcar natural evitará que caigamos en la tentación de picar entre horas. Para las comidas, apuesta siempre que puedas por las legumbres. Se trata de un ingrediente versátil y muy saludable que, además, se puede añadir a cualquier ensalada.
Finalmente, para la cena, hay que comenzar a desterrar el falso mito de que está prohibido comer hidratos de carbono. Por la noche se admite, sin ningún problema, la pasta o el arroz, pero eso sí, hay que controlar las proporciones. Y, en el caso del arroz, siempre mejor integral o quinoa acompañando a la carne o el pescado que iremos variando a lo largo de la semana.