SU DESAPARICIÓN SIGUE SIENDO UN MISTERIO
Ya son cinco años sin Yéremi. El 10 de marzo de 2007 era sábado de carnaval y el pequeño Yeremi se encontraba jugando con sus primos en un parque situado frente a su casa. A la una y media de la tarde su madre le llamó para que subiera a comer. Fue la última vez que habló con él.
Inmediatamente se inicia la búsqueda y menos de dos horas después se abre la investigación. Más de 400 personas entre familiares y vecinos rastrean todo el barrio, pero nadie ha visto nada.
El número 11 de la calle Honduras es un ir y venir de gente desesperada. La búsqueda se va ampliando poco a poco. Policía Local, Protección Civil, Guardia Civil y hasta el Ejercito de Tierra se implican en el rastreo. Pozos, galerías, senderos, cuevas...se busca hasta en las playas y en el fondo de la bahía, pero Yéremi sigue sin aparecer.
El drama familiar se acrecienta con la aparición de quienes pretenden sacar tajada. Videntes y extorsionadores acosan a la familia exigiendo dinero y dando informaciones falsas.
Ya son 1.821 dias sin Yeremi. Cinco años de dolor y misterio para sus padres que han de sobrevivir con la angustia de una vida que se les escapó de las manos.