NO HAY RIESGO
Metro de Madrid ha cerrado este viernes los andenes de la línea 10 en la estación de Tribunal tras detectar durante unas obras una placa de fibrocemento con amianto de un falso techo situado en el pasillo que da acceso a ellos.
Los accesos a estos andenes han sido clausurados a primera hora de la tarde de este viernes y permanecerán así "durante los próximos días", hasta que una empresa especializada retire este material "con todas las garantías", señala el suburbano madrileño en un comunicado.
La empresa explica que la placa de fibrocemento está "en una zona inaccesible" para trabajadores y usuarios y se encuentra en un estado no friable, por lo que, a su juicio, "no hay riesgo de exposición al material".
Metro de Madrid puso en marcha en febrero de 2018 una plan de desamiantado con el objetivo de retirar los materiales que pueden contener amianto de las infraestructuras, instalaciones y del material móvil de Metro de Madrid Metro de Madrid ya ha invertido 27,4 millones de los 140 millones de euros previstos hasta el año 2025 en el plan de desamiantado.
No obstante, la normativa vigente permite mantener los materiales con amianto instalados con anterioridad a 2002, año en el que se prohibió su uso. La presencia de amianto en trenes se ha detectado, hasta ahora, en componentes de los trenes más antiguos de la red (modelos 2000 y 5000), y en instalaciones de medio centenar de estaciones, así como en algunas bóvedas y en la marquesina de la estación de Príncipe Pío que comparten Metro y Cercanías.
Además, mientras se procede a la retirada de los materiales con amianto identificados, Metro tiene establecido un plan de inspecciones de seguridad y mediciones de control para garantizar que las instalaciones existentes se encuentran en buen estado y no suponen un riesgo de exposición a fibras de amianto.
De forma paralela, Metro de Madrid ha efectuado hasta ahora más de mil reconocimientos médicos específicos para descartar problemas de salud por esta circunstancia a trabajadores de la compañía, sin haberse detectado hallazgos patológicos compatibles con la exposición al amianto.
Hasta la fecha son cuatro los casos de trabajadores de Metro de Madrid con una enfermedad profesional por exposición a fibras procedentes del amianto, de los cuales dos han fallecido, y uno más del colectivo de maquinistas que ha sido reconocido por la Seguridad Social por estar jubilado y no tener ningún vínculo con Metro de Madrid. Los dos trabajadores fallecidos, con patologías de carácter maligno, comenzaron su andadura laboral en los años setenta y ochenta y desempeñaron su trabajo en el ámbito del mantenimiento del material móvil.