Inmigración
Este jueves han llegado al archipiélago 473 personas a bordo de seis embarcaciones a las islas de El Hierro, Lanzarote, Tenerife y Gran Canaria.
La indecisión política sobre el destino de los migrantes que llegan a nuestro país continúa en toda Europa mientras que cientos de personas siguen llegando a las costas canarias. Este jueves casi medio millar de personas han arribado a las islas a bordo de seis embarcaciones y resulta llamativo que tres de ellas lo hayan hecho por sus propios medios o cuando estaban prácticamente en el muelle.
Ha sido una jornada frenética para los equipos de rescate de prácticamente todas las islas. Durante la madrugada llegaron tres embarcaciones, la primera de ellas a Playa del Inglés en la isla de Gran Canaria no fue localizada por los servicios de Salvamento Marítimo y llegó por sus propios medios a la misma playa. A bordo viajaban tres personas a bordo.
También durante la noche, otras dos pateras llegaron a la isla de Lanzarote, la primera con dos personas a bordo y una segunda con 58 personas, ambas embarcaciones fueron localizadas muy cerca ya de la costa.
Durante la mañana la actividad se centró en las islas de El Hierro y Tenerife. El primer cayuco fue localizado al sur de la isla de Tenerife a primera hora con 57 personas a bordo, todos de origen subsahariano. A mediodía una patera fue localizada justo por fuera del muelle de La Restinga en la isla de El Hierro, en ella viajaban 170 personas. Y pocas horas después localizaban otra embarcación a seis millas de esta misma isla con 183 personas que fueron rescatadas y atendidas en el muelle de La Restinga.
La casualidad hizo que ayer mientras el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, hacía declaraciones en el muelle de La Restinga sobre el problema migratorio de las islas, llegara un cayuco. Una imagen que refleja la doble realidad que se vive en Europa y particularmente en Canarias con respecto a la inmigración.
Desde el archipiélago, el presidente del Gobierno de Canarias asegura que sigue esperando por una fecha para volver a sentarse a negociar, “mientras que siguen llegando pateras a nuestras costas porque Canarias se está convirtiendo en la cárcel de todos esos niños”. Una de las principales consecuencias de la saturación de los centros de acogida de menores es el problema de la escolarización ya que no hay recursos suficientes para poder atenderlos.
Sobre la propuesta italiana de trasladar a los migrantes a países terceros, desde Canarias se mantienen en la postura opuesta. Clavijo sigue insistiendo en que no se trata de un problema político sino de un drama humanitario.
Sobre la devolución de menores ha asegurado que no va a haber devoluciones en caliente. "Las comunidades autónomas podemos llegar a acuerdos con los países de origen pero eso no significa que se les devuelva y se les deje abandonados. Seguirán siendo atendidos en este caso por el Gobierno de Canarias", aseguró.
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