SOLO COBRA LOS 400 EUROS DEL PARO
Es la imagen de la desesperación. Néstor está en la calle, sin ahorros y sin trabajo. Ha sido desahuciado y ha tenido que cambiar el piso en el que residían por el coche, lo único que le queda.
Néstor explica que eso le puede pasar a cualquiera, cuando hay trabajo puedes pagar y cuando te quedas sin trabajo corres el riesgo de que te pase esto. Camionero de profesión invirtió todas sus ganancias en un nuevo negocio que fracasó. Desde hace seis meses sus ingresos se reducen a los 400 euros que cobra del paro.
Mientras, y ayudado por el párroco de su ciudad, que le ofrece los pocos alimentos que tienen, prepara la comida de sus hijos. Reconoce que tiene que pedir agua y alimentos en los bares. Una rutina que, espera, tenga los días contados. Ha puesto el coche a la venta y espera, con ese dinero, alquilar una casa.
Esto y un trabajo es lo que demanda este padre de familia para que, sobre ruedas, solo se encuentre en su horario laboral.