Un caballo se desploma en las calles de Málaga por las altas temperaturas: "Están condenados a la explotación"

Extenuado y desplomado por las altas temperaturas, así ha acabado un caballo en Málaga. En las imágenes compartidas por PACMA se puede observar como el animal, que estaba tirando de un carruaje durante la feria que estos días se está celebrando en la ciudad de la Costa del Sol, permanece inmóvil en el suelo.

"Condenados a la explotación de los cocheros"

El partido animalista ha denunciado los hechos a través de Twitter: "Otro caballo se desploma "trabajando", esta vez en la feria de Málaga. Los animales "de producción" como este quedan fuera de la #LeydeProtecciónAnimalEstafa de la Dirección General de Derechos de los Animales".

En el mismo tuit, PACMA ha lamentado que los equinos están "condenados a la explotación de los cocheros". Los usuarios no han tardado en reaccionar: "¿Hasta cuando se disfrazará el maltrato animal en una tradición obsoleta y fuera de contexto?", se han preguntado algunos.

Cabe destacar que en mayo el propio partido solicitó la prohibición "por ley" del uso de caballos en ferias y romerías. En aquel momento recordó que en la última década habían muerto "más de un centenar de caballos" en este tipo de eventos. "Acontecimientos recientes, como la sonada muerte de un caballo en plena Feria de Sevilla a principios de mayo, el grave atropello de un coche de caballos a un grupo de seis personas el pasado día 22 de mayo en Dos Hermanas, y una aparatosa caída de otro equino enganchado al sistema de anclaje de su calesa en Córdoba, son solo algunos de los terribles sucesos que se han dado en la última década en este ámbito", aseguró PACMA.

Caballos asfixiados por el calor en Palma

No hace ni un mes que se produjo un hecho similar en Palma de Mallorca cuando otro caballo cayó al suelo ante la mirada de los turistas, que seguían montados en la galera, mientras algunos viandantes pedían agua para el animal. "Qué desgracia, de verdad, pobre caballo. Y la gente en vez de bajarse...Pero bájense, ¿cómo no se van a bajar?", recriminaban los presentes.