según el portavoz de la familia
Blanca se sintió arrinconada cuando se retiró. " Adri me he sentido como un caballo de carreras, cuando he dejado de ganar carreras, me han abandonado en el campo". Aún así nuestra mejor esquiadora no dudó en pedir ayuda, asegura su cuñado y portavoz de la familia y "la encontró en sus hermanos".
Todos los hermanos atesoran cientos de trofeos pero Blanca apenas ganó dinero "no se podía recibir dinero en metálico, es una nómina de la Federación mileurista". Su situación mejoró cuando abrió con sus hermanos una tienda deportiva que funcionó durante 20 años.
La medallista hizo lo que pudo. Participó en varios programas y acudía a todas las propuestas que le llegaban "Claro trabajas hasta los 32 pero vives hasto los 80", asegura Adrián..
La situación de Blanca Fernández Ochoa llegó al límite hace unos meses, "acababa de vender su casa". De lo que Blanca nunca tuvo dudas es del cariño de la gente. La familia aún no ha podido contestar a los miles de mensajes recibidos estos días.