Día Mundial contra el Cáncer de Mama
El biobanco del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas alberga 45.000 muestras humanas, todo un tesoro biológico que permite luchar contra el cáncer. Con ellas se puede diseñar tratamientos cada vez son más personalizados o mejorar el diagnóstico precoz.
Entramos en el biobanco del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas en Madrid. Entre el humo del nitrógeno líquido en un recipiente dentro de un arcón se almacenan congeladas células humanas, muestras de tejidos y todo tipo de tumores. Eva Ortega, directora científica del Biobanco del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas nos dice que detrás de cada muestra hay la esperanza de ser curado. Pero también la posibilidad de realizar más avances científicos.
Ortega dice que cronificar una enfermedad como el cáncer es ya un éxito. El sueño sería conseguir curar la posibilidad de un avance científico.
En este biobanco se conservan muestras vivas a 196 grados bajo cero. Es todo un tesoro biológico que sirve, por ejemplo, para agilizar diagnósticos y además diseñar terapias individualizadas con menos efectos secundarios. Eva Ortega nos comenta que sobre esas muestras de tumores hacen un cribado farmacológico. Prueban cómo reacciona el tumor con determinado tipo de fármacos o medicamentos.
Los biobancos recogen, almacenan y gestionan todo tipo de muestras biológicas: tejidos sólidos como tumores, pelo, uñas o líquidos como la sangre y sustancias como orina, heces o saliva. Las acompañan de datos clínicos. Los biobancos también son esenciales para la investigación en enfermedades raras.
Para ser donante hay que firmar un consentimiento para que se pueda investigar con esas muestras. Virginia López es una de esas donantes, es tripulante de cabina. Con sus muestras estudian los efectos del jet lag en el sistema inmunitario y si son más vulnerables al cáncer. Virginia nos dice que sólo tienen que ceder sus fluidos y que eso es muy sencillo. Comenta además que querían saber si sus cambios de turno o de altitud les influye en su salud.
Aunque los investigadores no tienen acceso a la identidad de los donantes, la codificación en los biobancos permite la trazabilidad de las muestras, de manera que, en ocasiones, si el proyecto lo requiere, es posible complementar la información biológica y clínica con datos adicionales como, por ejemplo, el estilo de vida.
En este biobanco hay 45.000 muestras de 8.000 donantes que se conservan también en parafina a temperatura ambiente, catalogadas como una especie de biblioteca. La directora científica del Biobanco del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas nos enseña un tumor de mama y nos cuenta como en esa muestra se pueden hacer diferentes ensayos y ver como se comporta según la medicación.
El objetivo del biobanco es transformar el cáncer de hoy en las terapias de mañana.