Pelea
Golpes, puñetazos y patadas entre varios estudiantes mientras son jaleados por cientos de ellos que les rodean.
Todo comenzó dentro de las aulas cuando un alumno amenazó a otro y éste avisó a sus amigos para reunirse a la salida y enfrentarse a él. Ha ocurrido en el Instituto de Enseñanza Secundaria Luis Diego Cuscoy de la localidad de Cabo Blanco en el municipio tinerfeño de Arona.
El ambiente se fue caldeando a lo largo de la mañana y cuando terminaron las clases la gran mayoría de los más de 1.000 alumnos del centro esperaron por fuera del edificio para presenciar la pelea. Golpes, puñetazos y patadas entre varios estudiantes mientras son jaleados por cientos de ellos que les rodean. A pesar de la dureza de los golpes, no hubo que atender a ningún herido.
En las inmediaciones del centro no había efectivos policiales en el momento de la pelea y cuando llegaron, avisados por los vecinos, ya no quedaba nadie por lo que no se produjeron detenciones.
Grabaron vídeos y los subieron a redes sociales
Mientras varias decenas de ellos se golpeaban, muchos de los presentes se ríen, les animan y graban las imágenes que después han reenviado y que ya se han viralizado. Han corrido como la pólvora entre diferentes grupos de Whatsapp y a través de redes sociales como TikTok o Instagram.
Este martes el centro estaba franqueado por agentes de policía tanto a la hora del inicio de las clases como a la salida para evitar nuevos enfrentamientos. Y desde la dirección del centro han organizado la salida escalonada de los cursos durante los próximos días para evitar que puedan encontrarse alumnos de diferentes niveles.
Comunicado del centro
El Instituto ha difundido un comunicado en el que aclaran que la pelea fue iniciada "por jóvenes ajenos a este centro educativo y que estaban esperando sin camisa y con actitud hostil a un alumno del mismo". "Nos gustaría puntualizar que el equipo directivo del centro intentó disuadir a estas personas en cuanto se tuvo conocimiento de su presencia en las proximidades del centro, minutos antes del suceso, pero fue imposible, y que el grupo de alumnado que aparece en los vídeos que se han difundido mantuvo una actitud pacífica ante las provocaciones verbales hasta que fue agredido, momento en que se defienden de la agresión. Cabe destacar que este alumnado tiene una actitud trabajadora y responsable dentro del centro y trabaja codo con codo con el resto de compañeros y compañeras", añaden.
"En este centro condenamos firmemente estos hechos y cualquier tipo de violencia y apostamos por la resolución pacífica de los conflictos. Así, pertenecemos a la Red de centros por la Convivencia Positiva desde que esta se puso en funcionamiento. Desde el centro hemos tomado diversas medidas hasta que aclaremos los hechos ocurridos para determinar las acciones educativas más adecuadas en cada caso", puntualizan en el comunicado.